Por qué no enseño a distancia

Muchas veces me han preguntado por qué no doy clase a distancia,  por qué dejé de enseñar en el IE Business School o en la UPF, por qué rechacé ofertas para participar en másters online.

Hoy me he topado con una entrevista a Steve Jobs en la que hablaba de su visión de la educación. Para Jobs, el elemento más importante del aprendizaje era un guía que estimulase al que aprende:

“Another person that incites your curiosity, that guides your curiosity, that feeds your curiosity, and machines cannot do that in the same way as people can.”

Ni las máquinas pueden ni las personas podemos a distancia con el mismo efecto que en persona. Cuando enseño, quiero poder interactuar con mis alumnos en tiempo real, quiero que podamos explorar situaciones, objetos, conceptos. Que podamos entrar en una formulación para una app y desde ella saltar a una idea tomada de una lámpara del estudio, que todos la veamos y discutamos sobre si es o no buena. Que la dibujemos y la modifiquemos sobre la marcha, que veamos el efecto de ir en una dirección u otra.

Hacer algo así en tiempo real y a distancia todavía no es posible. 

Cuando Google presentó Classrom for Education acudí con ilusión y ganas de probarlo. Me decepcionó al instante. No es muy diferente de todas las herramientas de eLearning que he usado hasta ahora: documentos. El profesor manda documentos a los alumnos, los alumnos demuestran que lo han procesado mandando documentos al profesor.  

Las herramientas actuales no dan sincronía, no facilitan el diálogo, el de verdad. El de ver una cara de duda en un alumno, o de escepticismo, y saber que tienes que dar otro ejemplo para que el concepto que estás contando se entienda mejor. Ni siquiera la videoconferencia vale para eso, porque está limitada a una ventana y yo necesito 360 grados con los alumnos. ¿Cómo sino iba a poder pintar algo en la pizarra mientras hablo de espaldas a ellos, cómo iba a poder pasarles un objeto para que lo tocasen o cómo iba a sacar uno una app y hacernos una demo improvisada? 
 

Una clase en el Programa Vostok IV, sobre diseño para niños, con Karina Ibarra.

Una clase en el Programa Vostok IV, sobre diseño para niños, con Karina Ibarra.

La educación a distancia en diseño está muy limitada. Ofrecerla, especialmente a los precios que se ofrece hoy, sólo tiene sentido si el objetivo es el negocio sin más. Y si el objetivo del alumno es obtener una acreditación, sin más. En ese intercambio no hay guía ni curiosidad ni aprendizaje.

Por eso no me interesa.

 

PS: Bobby George ha publicado un artículo magnífico sobre el papel de la tecnología en la enseñanza, usando la entrevista a Jobs como hilo conductor. Se titula Playing with Gravity. Si te interesan estos temas no puedes dejarlo pasar.